Entre enero y noviembre de 2018, la Agencia de Trata y Violencia de Género de la provincia recibió un total de 12 mil denuncias por hechos relacionados con esos delitos. Como resultado de esas presentaciones, se hicieron más de 100 allanamientos y se detuvieron a 250 personas en todo el territorio provincial.
La Agencia de Trata y Violencia de Género depende de la Policía de Investigaciones (PDI) y fue reorganizada el año pasado, a nivel provincial, con la unificación de todas las áreas bajo una misma conducción. El objetivo es prevenir el delito con una mirada integral.
En la jurisdicción de Rosario la Unidad Fiscal determinó continuar con la antigua modalidad. Lo que significa que se reciben las denuncias en las comisarías locales, pasan a las áreas de género y luego a la Fiscalía para continuar con la investigación.
Mientras que el resto de las jurisdicciones de la provincia se manejan con el nuevo sistema: las áreas de género trabajan directamente con Fiscalía y se apunta directamente al imputado, se investiga, se hacen tareas de inteligencia y se recolectan todas las pruebas necesarias para llegar a la condena del atacante.
La directora de la Agencia, Marcela Romagnoli, mencionó que “esto implicó un gran cambio a nivel provincial que demandó mucho tiempo de organización, capacitación especial para el personal y una reorganización de tareas de los efectivos policiales”.
“Antes, los delitos de trata y de violencia género se trabajaban de manera independiente; ahora se confluye en un solo equipo. Es decir, ambos delitos se entrelazaron y ahora se trabajan en conjunto, lo que demanda un mayor compromiso de todas las partes”, agregó.
Para Romagnoli, el aumento de las denuncias es un dato positivo ya que “al haber mayor protección y más opciones de ayuda para las víctimas, las mujeres se animan a denunciar los hechos y se puede lograr una condena para el agresor”.
La Regional I (departamentos La Capital, Garay, San Justo, Las Colonias, San Jerónimo y San Martín) tiene el mayor índice de hechos de violencia y denuncias sobre los delitos más comunes, como las agresiones físicas, amenazas, violación ilegítima de la libertad, coacciones y agresiones sexuales.
Dónde denunciar
Desde la provincia destacaron que muchas veces las víctimas de violencia de género no se animan a realizar la denuncia debido al temor por una agresión mayor.
Desde 2017, a partir de la unificación de las áreas de género, hay mayores opciones para proteger a las mujeres. Anteriormente solo las comisarías eran las encargadas de la toma de denuncias. Pero en la actualidad la provincia cuenta con diversos lugares de atención, con mayor especialización en este tipo de delitos y con una mirada integral.
Como primera instancia, se puede llamar a la central de emergencias 911, o acercarse a la comisaría más cercana por jurisdicción, al área de Género de cada localidad, a la Comisaría de la Mujer o al Centro Territorial de Denuncias.
Estos organismos trabajan directamente con la unidad fiscal de Violencia de Género, Familiar y Sexual y permiten una mayor efectividad para la resolución del caso.
Romagnoli mencionó que los policías tienen “la obligación de actuar ante cualquier caso de violencia o abuso”. Asimismo, deben explicarle a la víctima cuáles son sus derechos y en qué consiste la instancia penal a fin de proseguir con la denuncia y detener al acusado, además de derivarla a la Agencia de Investigaciones sobre Trata de Personas y Violencia de Género para profundizar en el caso y presentar todas las pruebas necesarias.