La historia de Jonita fue corta, intensa y signada por hechos sangrientos en calles con nombres de flores. Murió antes de ser grande. Tenía 17 años y lo ejecutaron poco antes de la medianoche de ayer en el límite de los barrios La Granada y Las Flores, ubicadas en el extremo sur de Rosario. Lo habían detenido hacía un año cuando ingresó a un hospital con un tiro en el cuello y recuperó la libertad el mes pasado. Pero una nueva captura ya pesaba sobre su persona por el crimen de un empleado portuario de 48 años perpetrado hace dos semanas.
En su prontuario, con más causas que años de vida, figuran media docena de homicidios y tentativas, además de innumerables robos y balaceras atribuidas a Los Cambichos, Chumbitas o Chumpitas, banda conformada con otros pibes del barrio conocidos como rastreros por arrebatar, y cobrar peaje a sus propios vecinos, además de mejicanear a narcos de la zona.
Minutos antes de la medianoche de ayer, Jonatan David Ávalos caminaba junto a otro pibe de 15 años por Melián y Caña de Ámbar, en zona de La Granada, a metros de la Circunvalación que la separa de Las Flores.
Según fuentes policiales, un muchacho de 20 años conocido como Pototo apenas lo avistó desenfundó un arma y abrió fuego sin mediar palabra. Un certero tiro le atravesó la cabeza mientras que otro le quedó incrustado en el medio del pecho.
En el lugar encontraron siete vainas, cinco calibre 9 milímetros y otras dos de 38 y 22. Si bien las primeras pesquisas indicaban que el autor de los disparos fue un solo sujeto, detectives de la sección Homicidios y la subcomisaría 19ª intentaban anoche determinar si hubo más de un tirador o si Jonita intentó defenderse.
Aunque en el lugar no se halló ningún arma ni tampoco rastro del pibe que estaba junto a Jonita, quien ayer fue buscado intensamente en el barrio para ver si estaba herido o si daba algún dato certero sobre el hecho.
Tras identificar al presunto autor de los disparos, el juez de Instrucción de la 7ª Nominación, Juan Andrés Donnola ordenó un allanamiento en su domicilio, que no arrojó resultados positivos aunque fue secuestrada un arma calibre 38, que fue enviada a peritar.
El caso lo investiga la subcomisaría 19ª y la sección de Homicidios de la Unidad Regional II.