Finalmente, el gobierno santafesino confirmó ayer que volverán las fuerzas federales a la provincia para reforzar la seguridad. A través de su cuenta de la red social Twitter, el gobernador Miguel Lifschitz anunció que se llegó a un acuerdo con el Ministerio de Seguridad de la Nación para trabajar en forma conjunta y coordinada sobre el tema. Fue luego de muchos días de debate en torno al supuesto intento, por parte de la Nación, de querer controlar a las fuerzas provinciales, algo que fue descartado ayer por los ministros Pablo Farías y Maximiliano Pullaro.
Los detalles finales del acuerdo se conocerán en las próximas horas. Antes del fin de semana, según Lifschitz. Antes hubo idas y vueltas y versiones nunca probadas que indicaban que las fuerzas federales llegarían a tierras santafesinas si desde el gobierno nacional se tenía el control pleno de la Policía provincial.
El gobierno santafesino lo desmintió y luego el propio Lifschitz confirmó que se reforzará la seguridad con personal de distintas fuerzas en todo el territorio provincial, pero en particular en la ciudad de Rosario. Con el trabajo conjunto se apunta a “lograr los mejores resultados”, indicó el mandatario socialista.
Lifschitz también se refirió ayer a la marcha de esta tarde por seguridad y justicia: “Los ciudadanos tienen la oportunidad de expresarse en paz. Aceptamos y escuchamos las críticas”. Y ensayó una autocrítica sobre la política provincial de seguridad: “La venimos peleando con aciertos y errores. Vamos de frente y encaro la batalla personalmente, hasta las últimas consecuencias”.
Aún no se definió cuántos serán los efectivos que enviará el gobierno nacional; en la actualidad hay tres mil en toda la provincia, 800 de ellos en la ciudad.
El diputado y presidente del PRO santafesino, Federico Angelini, también celebró el acuerdo en su cuenta de Twitter: “La decisión está tomada. Con Mauricio Macri y ministra de Seguridad (Patricia Bullrich) la seguridad vuelve a Santa Fe para recuperar la libertad y vivir seguros”.
Una estrategia común
Ayer, en la reunión del Consejo Económico y Social de Rosario –de la que participó además la intendenta Mónica Fein–, Lifschitz habló sobre la relación con el gobierno nacional y las fuerzas de seguridad nacionales: “Estamos trabajando para que Santa Fe tenga una dotación permanente de las cuatro fuerzas de seguridad federales: Gendarmería, Prefectura, Policía Federal y Aeroportuaria, realizando trabajos y operaciones de manera sostenida”.
Lifschitz explicó que es necesario desarrollar con el gobierno nacional “una estrategia común para controlar los 30 puertos sobre el litoral fluvial y las rutas que nos vinculan con Paraguay y Bolivia, entre otros aspectos”. La misma preocupación había planteado el martes el ministro Pullaro en su reunión con diputados provinciales. También el jefe del bloque socialista, Rubén Galassi, se refirió a la presencia de Gendarmería en la provincia: “Santa Fe está dentro de la República Argentina y por lo tanto corresponde una presencia de fuerzas federales permanente en el territorio en la medida de las necesidades. No es un problema meramente cuantitativo”. Y reclamó: “Si queremos hacer las cosas seriamente, cada día que pasa es duro, pero para no hacer un show para la tribuna hay que tomarse el tiempo necesario. Si pensamos en el mediano y largo plazo hay que hacer un plan que piense cómo articular todos los recursos, no para dar una foto de un día, sino para revertir de verdad este proceso. Creo que lo importante es que ahora se diagrame un plan en donde participe cada uno con sus responsabilidad, Policía provincial, Ministerio de Seguridad de la provincia, con las fuerzas federales y el Ministerio de Seguridad de la Nación, pensando, no solo en mañana, sino para generar resultados al mediano y largo plazo”, concluyó Galassi.
Proyectos en la Legislatura
La Cámara de Diputados tratará hoy dos proyectos vinculados a la seguridad: la ley de decomiso y la creación de 61 nuevos cargos para el Ministerio Público de la Acusación (20 fiscales y 41 para colaboradores directos).
La ley de decomiso propone la creación de un organismo que tendrá por objetivo administrar los bienes secuestrados provenientes de actividades ilícitas. El miércoles, los ministros Maximiliano Pullaro (Seguridad) y Ricardo Silberstein (Justicia) les pidieron a los diputados la rápida sanción del proyecto. Ayer, el jefe del bloque socialista, Rubén Galassi, confirmó que “hay consenso” entre los legisladores para que esta tarde haya media sanción.
La norma prevé la creación de un ente autárquico dependiente del Ministerio de Justicia que se ocupe de la administración, custodia, disposición y también el eventual decomiso de los bienes secuestrados a individuos o bandas que cometan delitos de competencia provincial. “Santa Fe será la primera provincia del país en contar con un mecanismo de esta naturaleza”, explicó Galassi. “Esta ley de decomiso –continuó el diputado socialista– servirá como herramienta fundamental en la lucha contra el delito, apuntando a aquel lugar que más le duele a la criminalidad organizada: sus ganancias. Queremos alentar a los fiscales y jueces a que vayan por esta vía y para ello les proporcionamos las herramientas”.
El otro proyecto tiene media sanción del Senado desde la semana pasada y consiste en la creación de 10 cargos de fiscales titulares, 10 de fiscales adjuntos, 3 secretarios de gestión procesal, 15 escribientes mayores y 23 colaboradores mayores auxiliares: un total de 61 nuevos cargos dentro de la órbita del Ministerio Público de la Acusación, a pedido del fiscal general Julio De Olazábal. El proyecto fue ingresado el 9 de junio por el senador Joaquín Gramajo (PJ) y se votó recién una semana después de la masiva marcha Rosario Sangra. El propio De Olazábal les reclamó a los senadores, en una reunión realizada la semana pasada, su rápida sanción. El titular del Ministerio Público de la Acusación sostiene que los estándares internacionales aconsejan 8 fiscales cada 100 mil habitantes y en la provincia hay “3,5 fiscales cada 100 mil habitantes, menos de la mitad”.