En la noche del lunes, en la previa de conocerse el dato de la inflación de febrero, el Banco Central decidió bajar la tasa de interés que pagan los plazos fijos a los ahorristas de modo de frenar al mismo tiempo el descenso del dólar de las últimas semanas.
De ese modo, comunicó que desde el martes 12 de marzo se reduce la tasa de política monetaria del 110% al 80% TNA para “estimular el consumo y la inversión de la economía”. EL BCRA deja que los bancos ofrezcan tasas libremente, ya sin un piso.
Por eso, tras el anuncio las entidades bancarias ofrecen tasas del 70 al 75% anual, lo que implica una tasas efectiva anual del orden del 122%, cuando la inflación estimada para los próximos 12 meses se ubica en torno a un 140%.
EL BCRA anunció que elimina la tasa mínima de plazo fijo. Esto es para promover una “mayor competencia en el sector bancario y beneficiando a los consumidores con mejores condiciones de ahorro e inversión”.
Sin embargo, los bancos no han salido a ofrecer tasas más altas para captar más ahorros por lo que se especula que esos fondos pueden ir hacia el dólar blue o los financieros o hacia bonos atados a la inflación.
De todos modos, se entiende que la baja de tasas puede facilitar el acceso al crédito para las Pymes y grandes empresas. Otros analistas sostienen que se busca licuar aun más el valor del peso frente al dólar.
“Luego de la liberación de tasas para plazos fijos las mismas se derrumban, del 110%TNA que estaban ayer caen a entre 70%/75% según bancos. Esto es entre 5,75%/6,15% mensual frente a una inflación que se estima en 18% para marzo. Full licuadora”, escribió el analista financiero Cristian Buteler.
Antes de que se conociera la baja de tasas, el analista financiero Salvador Distefano, había advertido a Data Clave que “lo que nosotros estamos observando es básicamente que el mercado tiene una tasa de interés muy alta. Entonces se da el círculo vicioso en donde se convive una tasa de interés alto, y un dólar bajando, que termina siendo nocivo para la economía”.
Es que la Tasa Nominal Anual del 110% que regía hasta ahora implicaba una Tasas Efectiva Anual (TEA) del 186,65%, muy por encima de la inflación proyecta para los próximas 12 meses, justo cuando hoy se conocerá la inflación de febrero, que podrían rondar el 15%.
Un dato de referencia: la inflación de la ciudad de Buenos Aires fue de 14,1% en febrero, en clara desaceleración pero acumulando una suba de 38,9% en lo que va del año. Para marzo se estima una cifra similar.