Y un día reapareció Ezequiel Ávila por Tiro Federal. A dos meses y medio del lamentable episodio que protagonizó al haber sido sorprendido por personal policial cuando irrumpió en el predio de Pizzarotti y Santa Coloma en la madrugada del pasado 26 de febrero, el volante creativo tirolense de 19 años se hizo presente ayer en el complejo futbolístico de zona noroeste, para reunirse con el presidente Carlos Dávola.
“No tengo nada que comentar al respecto”, manifestó escuetamente el mandamás tirolense cuando fue consultado por la sorpresiva reaparición del Chimi Ávila por el predio, mientras los demás futbolistas (los juveniles que pertenecen al club y aquellos que rescindirán contrato y no continuarán) esperaban por la presencia del presidente para dialogar por primera vez tras la eliminación a manos de Guaraní Antonio Franco del Torneo Argentino A.
El Chimi Ávila ingresó al predio en un vehículo particular y raudamente se dirigió hacia la oficina del presidente Dávola. Y lo que dialogaron el futbolista y el dirigente quedó bajo absoluto hermetismo. Dos meses y medio atrás, el volante fue detenido por personal policial cuando ingresó al complejo futbolístico con fines sospechosos.
“El presidente no me comentó nada al respecto. Pero no me sorprendería que en pocos días el jugador vuelta a trabajar con los chicos del club que jugarán en la Primera Local”, deslizó el técnico Hernán Carlisi sobre Ávila.
Considerado como la última joya futbolística de las divisiones inferiores, el Chimi Ávila lleva jugados 50 partidos y convertidos 7 goles en la primera división tirolense. Debutó con 16 años en el campeonato de la B Nacional y participó de las dos últimas campañas del equipo en el Torneo Argentino A. ¿Habrá recibido el indulto?