El director técnico de Racing Club, Luis Zubeldía, admitió hoy el interés por el volante de Lanús Mauro Camoranesi, a quien lo consideró «del perfil que le gusta a la gente» de su institución.
«Le aportaría muchísimo al equipo, tiene claridad para circular la pelota, algo parecido a lo que hacía (Juan Sebastián) Verón o (Juan Román) Riquelme. Es el perfil de jugador que le gusta a la gente de Racing», aseguró el entrenador de la Academia en diálogo con el programa Identidad Racinguista de Radio La Red, cuando fue consultado por un «volante» que estaba en los planes.
Luego, el nombre de Camoranesi fue develado, y aunque el DT aclaró que no había «nada concreto» y que por el momento son «sólo rumores», no ocultó la intención de tenerlo entre sus filas.
«Tanto (Diego) Villar como Camoranesi nos pueden dar una mejor circulación de pelota en el mediocampo. Sería importante conseguir ese tipo de jugadores», confesó Zubeldía, sumando al volante por derecha de Godoy Cruz.
A su vez, el exdirector técnico de Lanús y Barcelona de Ecuador se refirió a las incorporaciones de José Sand y Javier Cámpora, quien aunque no firmó su contrato está muy cerca de sumarse.
«Si se da lo de Cámpora, vamos a tener dos jugadores de renombre, de buenas estadísticas y que están en plenitud física», explicó, al tiempo que remarcó que ambos delanteros serán importantes para «aumentar el promedio de gol del equipo».
Sobre este mercado de pases, el ex ayudante de Ramón Cabrero indicó que están «bien encaminados» ya que conoce el «Mundo Racing», aunque entiende que las «negociaciones se ponen difíciles porque el tiempo es poco y cada club tiene su forma de negociar».
Por su parte, el pampeano de 31 años, que debió retirarse de la actividad profesional -a los 23- por una lesión en la rodilla, contó que no extraña ser futbolista y opinó sobre la difícil profesión de entrenador.
«Todos somos aves de paso para las instituciones, por eso tenemos que dejar un buen material y una buena estructura. Si podemos acompañar con resultados mucho mejor», señaló.
Y cerró comentando que lo más «gratificante» para un entrenador es «dejarle algo» al futbolista y que éste se lo reconozca.
