Las aguas estaban calmas después de varios supuestos conflictos en el Gobierno aunque todos esperaban alguna voz oficial que despeje unas cuantas dudas. El encargado, como siempre, fue el jefe de Gabinete y hombre todo terreno mediático, Aníbal Fernández, que desmintió cualquier tipo de enfrentamiento con el ministro de Economía, Amado Boudou por los dichos sobre la inflación. Además, aseguró que no fue una derrota del oficialismo la caída de la sesión que debatía el proyecto del Presupuesto 2011 que se trató en la Cámara de Diputados pero no logró su aprobación.
A través de su cuenta personas de la red social Twitter, Fernández despejó dudas sobre un probable frente interno de conflictos en el Gobierno y aseguró que «la pretensión de varios de componer una gresca entre el jefe de Gabinente, Boudou, (Julio) De Vido y (Florencio) Randazzo, solo cabe en sus cabezotas afiebradas».
En concreto, el funcionario se refirió al contrapunto con el ministro de Economía, quien había considerado que la inflación «solo afecta a las clases medias altas», mientras que el jefe de Gabinete había negado.
«El teórico enfrentamiento con mi amigo Amado (Boudou), es la comidilla de las chusmas puestas a escribir ´Que se arranquen los pelos´ estarán diciendo», y agregó que «Amado no dijo lo que dicen que dijo ni yo salí a desacreditarlo. Son dos análisis distintos, dos situaciones distintas, ergo, dos respuestas distintas».
Por otra parte, acerca de la polémica sesión de Diputados en la que se no logró aprobar el Presupuesto 2011, Fernández consideró que por no existir otro proyecto debería haberse aprobado el impuesto por el Gobierno «sin más trámite».
«El Gobierno envió el único proyecto de Presupuesto para 2011 y conforme a la tradición legislativa, debería haberse votado sin más trámite», y añadió que «un simple análisis pone las cosas en su lugar; nuestros legisladores tienen en claro su objetivo q es votar el presupuesto enviado por el Poder Ejecutivo»
Por último, afirmó que la oposición pretende condicionar al Gobierno pero que no lo permitirán, al tiempo que, en caso que eso ocurra, «tomaremos decisiones que garanticen el modelo».
«Es posible que, los enemigos (no digo adversarios) sostengan los engendros q presentaron para pretender condicionar al Poder Ejecutivo. Que ni lo sueñen En ese caso tomaremos decisiones que garanticen el modelo definido por la presidente Cristina de Kirchner y los beneficios conquistados para los argentinos en estos 7 años», concluyó.
