Fue cerca del mediodía de este viernes en avenida Pellegrini al 1300, casi esquina Corrientes: un nene, después se supo que tiene 11 años, había pasado por la red de cotención de un balcón del octavo piso, estaba con medio cuerpo sobre el vacío y sostenido por su hermano de 15 en una tensa situación que llegó a buen puerto cuando dos repartidores de cerveza que pasaron por el lugar detuvieron su camión, subieron al edificio, rompieron la puerta del departamento superior a patadas y desde arriba consiguieron poner fuera de peligro al menor.
Todo el trance fue observado por los transeúntes que, a esa hora, eran muchos. «Veníamos con el camión porque somos repartidores de cerveza y vimos que la gente miraba para arriba. Ahí observamos al nene colgado. Por eso, con mi compañero Facundo reaccionamos inmediatamente porque la gente estaba en shock», relató Rodrigo a los medios.
Los repartidores dejaron el camión en medio de la avenida Pellegrini. «Pensé que podía ser mi hijo y no me importó nada», explicó Rodrigo. Él y su compañero golpearon en el ingreso del edificio hasta que una persona les franqueó la entrada, y así consiguieron ingresar a un departamento, violentando la puerta tras llamar a otros sin que los atendieran, y salvar al pequeño.
En el mismo edificio y piso ocurrió un suceso similar la tarde del domingo 5 de agosto de 2018. En ese momento, la comoción fue por un nene de 8 años con aparente retraso madurativo que quedó, desnudo, colgado de sus brazos del balcón. En ese episodio, fue un vecino quien trepó y logró rescatar al chico. No está claro que se trate del mismo niño de este viernes.
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Tras el caso ocurrido hace cinco años, fuentes policiales señalaron que varios testimonios coincidían en que al niño se lo había visto vagando solo y perdido en el edificio.
