La seguridad fue reforzada nuevamente el miércoles alrededor de la casa de Abbottabad (Pakistán) en la que el líder de Al Qaida, Osama Bin Laden, fue liquidado el lunes por un comando estadounidense, constató la AFP.
La policía bloqueó totalmente el barrio Bilal, donde se encuentra la casa, en una zona residencial de la ciudad de Abbottabad, situada al norte de Islamabad.
El martes, cientos de curiosos y de periodistas paquistaníes y extranjeros lograron llegar hasta el muro que rodea la casa, pero no a la residencia.
El miércoles «más de 300 policías fueron desplegados en las entradas (de Bilal), en la ciudad y alrededor de la casa, por razones de seguridad», indicó a la AFP un oficial de la policía de Abbottabad que pidió el anonimato.
El ejército, que había ocupado y bloqueado el barrio unos minutos después de terminar la operación comando norteamericana el domingo por la noche, entregó el martes la responsabilidad de la seguridad de la casa y de sus alrededores a la policía.
El miércoles por la mañana, un periodista de la AFP pudo ver que una decena de militares volvía a entrar en el barrio y tomaban posiciones alrededor de la casa.
Los habitantes del barrio que entran al mismo son objeto de un registro corporal y deben demostrar su identidad. En cambio, se impidió a obreros que trabajan en la zona llegar hasta sus lugares de trabajo.
El martes, cientos de periodistas se agruparon al pie del muro que rodea la casa para tratar de filmar el interior de la misma, en medio de numerosos curiosos que tomaban fotos delante de las puertas de hierro del recinto. Decenas de jóvenes manifestaron incluso delante de l casa, gritando consignas contra Estados Unidos y cantando «¡Osama está vivo!».