Una casa y un galpón del partido de Hurlingham fueron allanados esta mañana en busca del lugar donde permaneció cautiva al menos seis días Candela Rodríguez, la nena de 11 años cuyo cadáver apareció ayer por la tarde cerca de la Autopista del Oeste tras permanecer nueve días desaparecida.
Fuentes policiales aseguraron que el procedimiento era realizado en una casa y en un galpón deshabitado de la calle J.B. Kiernan 992, donde los vecinos aseguraron que vieron movimientos sospechosos durante el último fin de semana.
Ese galpón está ubicado a unas 15 cuadras del lugar del hallazgo del cadáver de Candela, y esta mañana era inspeccionado por peritos en busca de rastros.
Trascendió que en el lugar se encontraron restos de comida que serían compatibles con los encontrados en el cuerpo de Candela en la autopsia.
Según contaron los vecinos, la casa había estado habitada hasta hace un año por una pareja de ancianos, pero tras su muerte nunca más se acercó nadie al lugar.
Sin embargo, relataron que este fin de semana se hizo presente una hija de los ancianos junto a tres jóvenes con tachos de pintura, lo que llamó la atención de los vecinos que decidieron llamar a la policía.
Los efectivos policiales llegaron esta madrugada al lugar y realizaron un relevamiento en la casa y, luego, en una habitación lindera utilizada como galpón. Esta mañana, personal policial permanecía apostado en el lugar.
Durante la madrugada, otros grupos operativos de la policía bonaerense realizaron más procedimientos en busca de los delincuentes que asesinaron a la nena, sin resultados positivos.