El fiscal de Miramar, Roberto Moure, afirmó hoy que unas huellas digitales encontradas en un televisor de la casa del niño Gastón Bustamante, asesinado en Miramar, y una filmación de un supermercado son las pruebas que más comprometen al detenido hoy por el caso.
Moure explicó a la prensa que «si bien no se puede determinar la antiguedad de las huellas, los peritos dicen son contemporáneas con el homicidio, es decir, no pudieron estar allí durante más de 24 horas».
«A su vez, tenemos testimonios de los familiares directos que nos indican que esa persona nunca tocó ese televisor», afirmó el fiscal y detalló que «las huellas son de haber levantado el televisor y no de haberse estampado de otra manera».
Moure dijo que la plata robada de la casa no estaba adentro del aparato, pero tal vez el asesino haya simulado trasladar el televisor para hacer pasar el hecho por un robo más ordinario o para desarmarlo a ver si estaba la plata adentro.
Además, explicó que no se detectó ADN extraño al grupo familiar en la escena del crimen, ya que de las 32 huellas que se recolectaron en la casa, no hay ninguna que no sea de ellos.
Otra prueba con la que cuenta el fiscal es una filmación de un supermercado de Miramar donde se lo divisa a Ramón a dos cuadras del lugar de la casa de Gastón, a diez minutos del crimen.
Moure dijo Ramón vive a ocho cuadras de lo de la víctima y que tras realizar una reconstrucción, «los tiempos dan para las dos cosas»: para que el joven se dirigiera desde la vivienda de Gastón al comercio tras el crimen o para que fuera hasta allí desde su propia casa.
El representante del Ministerio Público aclaró que este no es el único indicio que hay contra Ramón sino que se evaluaron conductas anteriores y posteriores al crimen que tuvo el imputado.
«A seis horas del homicidio, se presentó en la fiscalía a intentar desviar la investigación hacia otro familiar directo del fallecido y después tres o cuatro veces por día se presentaba en la comisaría para ver si había novedades y decía que si detenían a ese familiar, le avisemos diez minutos antes», recordó en alusión a la madre del niño.
Moure resaltó que el detenido también era la única persona fuera del entorno familiar directo que conocía sobre la existencia de dinero en esa vivienda.
El fiscal sostuvo que «el móvil (del crimen) sería el robo» y que «el nene lo habría descubierto (a Ramón) en el transcurso» de ese delito, razón por la cual lo mató, ya que «tenía algo más que la libertad que perder, su noviazgo».