El presidente del Partido Socialista, Hermes Binner, volvió a criticar al gobierno nacional por enviar a las provincias menos fondos que los establecidos en la Ley de Coparticipación Federal y advirtió que Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe «están en serias dificultades».
«Hay tres provincias que están en serias dificultades, todas pertenecen a la Pampa Húmeda que tiene una riqueza extraordinaria de la soja», advirtió Binner, en una nueva crítica como la que había formulado el jueves en defensa de los tres de los cuatro distritos económicamente más poderosos del país.
Al respecto, sostuvo que esas complicaciones se deben a que «no se envían los fondos que corresponden al 34,6 por ciento que determina la ley».
En su artículo séptimo, la ley 23.648 de Coparticipación establece que «el monto a distribuir a las provincias, no podrá ser inferior al treinta y cuatro por ciento de la recaudación de los recursos tributarios nacionales de la Administración Central, tengan o no el carácter de distribuibles por esta Ley».
El flamante presidente del Partido Socialista explicó que los cambios en las relaciones fiscales entre la Nación y las provincias derivaron en una alteración que, en el caso de Santa Fe generó «una constitución invertida».
«Históricamente la provincia tenía (del total de sus recursos) un 30 por ciento de coparticipación nacional, hoy tiene el 70 por ciento y el resto es de recursos (propios), por lo cual habla de una debilidad de la provincia y del sistema democrático», sostuvo.
El titular del Frente Amplio Progresista (FAP) criticó la aprobación de los proyectos en la Cámara de Diputados señalando que «el Presupuesto se discute a libro cerrado, no se puede agregar una coma ni discutir nada, uno está de acuerdo o no lo está».
«Es un comportamiento usual del gobierno, mientras tiene mayoría absoluta todo se aprueba como un trámite y cuando no la tenía vino el festival de los DNU (decretos de necesidad y urgencia)», puntualizó.
Por último, Binner expresó que «la mayoría también tiene la obligación democrática de abrir el debate, de consultar y discutir con la minoría» y recordó que si en Santa Fe se manejara habría un grave problema. “Acá el presupuesto se sube, se destripa, se baja, se cambia y lo aceptamos porque es el mecanismo de los tres poderes funcionando», concluyó.