Desde la Tribuna: Como nunca el fútbol de Newell’s expresa la hecatombe institucional y política

Existe una mirada sobre Newell’s que intenta “explicar” la situación actual desde una complejidad que para este cronista no es tal.

En rigor lo que sucede no es otra cosa que una fuerte disputa de intereses que, obviamente, se contraponen.

Algunas certezas y futuro incierto

1. Ignacio Astore, actual presidente leproso, es Eduardo José López. Sus prácticas, sus mentiras vergonzosas y el desmanejo económico y financiero lo ponen de manifiesto.
2. No es para nada difícil de entender porque Cristian Fabbiani continúa como técnico de la primera división. No hay quien lo despida. Lo que es difícil de entender es porque Astore le renovó el contrato hasta el 2026 cuando estaban pactadas elecciones para diciembre de 2025. Fabbiani no renuncia porque, especula este cronista, es parte de un acuerdo.
3. A Fabbiani nunca le fue bien. Jugó mal, defendió peor y tuvo una alta dosis de “fortuna”. Consiguió muchos más puntos que lo que ofrecía el juego. La derrota (dolorosa) con Boca puso en evidencia un estado de cosas. La derrota en la Bombonera no fue (es) la causa es la consecuencia.
4. Los anuncios presidenciales del adelantamiento de elecciones nunca se concretaron tal vez por que Astore supuso que tenía alguna chance de recuperar algo de oxígeno y en el peor de los casos ocultar el desmanejo institucional.
5. Ignacio Boero no se mostró convincente en el pedido de adelantamiento de elecciones (como sí realiza ahora) y en la elección de la Comisión Electoral optó por un guiño a Astore.
6. La precandidatura de Cristian D’Amico de cara a las próximas elecciones es imposible separarlo de la inhabilitación de Julián González como candidato.
7. La sensación, pura especulación, es que los dos Iganacios y D’Amico unificaron sus fuerzas para dejar fuera de la contienda electoral a González.
8. Con González, a priori, fuera de juego, D’Amico se acerca más a Astore y dice que es por “el bien de Newell’s”. Curioso.
9. Por su parte Boero solicitó la renuncia de Astore, con más énfasis, y que la Comisión Fiscalizadora se haga cargo de la institución.
10. Hay una buena parte de dirigentes que acompañan a Boero que estuvieron cuando Guillermo Lorente se impuso en las elecciones de diciembre de 2008.

Quedan interrogantes sin respuestas. Igual que sobre el futuro leproso.