El Hincha

Desde la tribuna: una costumbre y otra hamburguesa gratis

Cada torneo aparece el maldito pensamiento, “esta vez les va a tocar, esta vez vamos a perder”, pero después algo indica lo contrario y te tranquiliza. Esta vez fue la llegada de Navas y la euforia desmedida

Por David Ferrara, fotos de Juan José García

Habrá hamburguesa gratis. Los redactores de estas columnas sobre los equipos que dividen el ánimo de Rosario tienen desde hace muchísimos años una apuesta sobre el resultado del clásico que, a decir verdad, en el último tiempo ya da pena cobrar. No porque no sea siempre un motivo de alegría compartir una comida con un amigo leproso, sino porque no queda bien que siempre pague el mismo, y porque a veces (nunca tan seguido) se está a merced de intérpretes que no defienden como se debe la camiseta.

En este caso, del lado canalla no hay lugar para la queja, porque incluso en los momentos de dudas, de bajos rendimientos, de ausencias o dificultades, este grupo (y los anteriores también) supo representar a su gente, entender qué está en juego, y también lo que siente el rival cuando ve la azul y amarilla en estos tiempos de dominio sicológico y deportivo.

Esta vez no hubo caminata por la ciudad, sí cábalas de mufa inversa a quien quisiera escuchar, pero mucho nervio frente a la tele y más cuando Mallo se lesionó. Pero Central le trajo calma rápido a su gente. De la mano de un Malcorra bendecido en los clásicos, de un Kingtana en versión premium y de dos definidores partícipes necesarios.

Antes que nada: perdón Duarte. Holan mantuvo al pibe en el equipo y por fin se le dio para el 1 a 0. Y el Bicho que le puso otro capítulo de gol colombiano a ese arco (recordar Arzuaga).

No hay careta en esas líneas, y hay que reconocer que cuando Banega descontó, hubo que desandar unas cuadras sin mirar el partido por miedo a haber roto la cábala, pero llegó rápido el grito desde los edificios y no hubo espacio para el terror porque el alarido no dejó dudas: “Vamos Central”. Y después se sumó el griterío y empezaron los bocinazos.

Cada torneo aparece el maldito pensamiento, “esta vez les va a tocar, esta vez vamos a perder”, pero después algo indica lo contrario y te tranquiliza. Esta vez fue la llegada de Navas y la euforia desmedida (a veces hasta parece fingida) en redes sociales, euforia que SIEMPRE es mala consejera. Y otra vez se llega al lunes contento, en el caso de este interlocutor políticamente correcto, sin lugar para la cargada, pero con la sonrisa que dirá todo. Y con hamburguesa gratis.

Entradas recientes

Central Córdoba, Argentino y Leones, los grandes protagonistas del sorteo de la Primera C 2026

En un hecho histórico para el fútbol de ascenso, los tres representantes rosarinos compartirán divisional…

diciembre 21, 2025

Provincial cerró el año de Liga Argentina con otra enorme victoria y el liderazgo del Sur

Cerró 2025 con récord de 11-2, ocho triunfos seguidos, cinco de ellos fuera de casa,…

diciembre 21, 2025

El Concejo Municipal de Alvear, en punto muerto tras dos semanas sin acuerdo

Tras dos semanas de negociaciones, aún no se llegó a un acuerdo sobre quién presidirá…

diciembre 21, 2025

Newell’s perdió por penales ante Belgrano de Córdoba y se quedó sin Copa Libertadores

El Trofeo de Campeonas terminó igualado sin goles en el tiempo reglamentario y se definió…

diciembre 21, 2025

Acassuso, rival de Newell’s en Copa Argentina, logró el ascenso a la B Nacional tras 79 años

El Quemero igualó 1-1 como visitante de Deportivo Armenio en Ingeniero Maschwitz e hizo pesar…

diciembre 21, 2025

Matías Rossi agiganta su leyenda tras consagrarse campeón 2025 del TC2000

El piloto de Toyota consiguió su sexto título y el quinto para la marca al…

diciembre 21, 2025