La amistad de Marcelo Polino y Antonio Gasalla acredita muchos años de trabajos compartidos, giras y encuentros. Tanto es así que el periodista fue quien acompañó hasta el fin de sus días al capocómico que murió el pasado 18 de marzo y con quien hablaba a diario, por eso no sorprende que Polino se emocione al decir “lo extraño”, tras contar que recibirá pertenencias del intérprete, al tiempo que reveló una importante noticia sobre la herencia.
“Hablé con la familia y la Justicia ya declaró como heredero universal a su hermano Carlos para que pueda disponer de los bienes con libertad, como correspondía que fuera. Estaba judicializado y tenía una curatela de por medio. Fue muy rápido todo”, contó el comunicador y showman.
“En estos días vamos a ir a la casa porque se va a cerrar y están sacando todo. No pasó de moda él. Sus sketchs de <El Palacio de la risa< tienen 35 años y siguen vigentes. Me emocioné porque la familia decidió darme algunas cosas del vestuario de Antonio», sumó Polino acerca de uno de los artistas refrenciales del país.
«Encontré casetes de cuando iba a tomar clases de guión con él y escribíamos monólogos. Él me enseñaba a escribir y en el medio hablábamos pestes de la gente. Era muy gracioso», continuó.
En cuanto a los vínculos del cómico, Polino explicó: “Era más cercano a Mirtha que a Susana. He hecho el puente para que hablaran. Con Susana fue más laboral. En la última etapa de él, Giménez estuvo muy amorosa. Ella me llamó para preguntarme cómo estaba Antonio y pautamos una ida a verlo pero no llegó”.
Por último, recordó el momento en que su amigo comenzó a desmejorar a causa de la enfermedad: “Yo estaba en el teatro, él hacía el personaje de La Gorda y me presentaba. Estaba detrás del telón y él no se acordaba de mi nombre”.
Los bienes de Antonio Gasalla, quien en algún momento de los comienzos de su enfermedad en gran parte fueron sustraídos de su propia casa, comprenden propiedades, obras de arte de altísimo valor y, entre más, todos los derechos de su obra.