El jefe del Ejecutivo español, Mariano Rajoy, nombró un gobierno reducido de 13 ministerios, con Luis de Guindos como ministro de Economía y José Manuel García Margallo, al frente de Asuntos Exteriores. Mientras que Soraya Sáenz de Santamaría fue designada vicepresidenta primera, ministra de la Presidencia y portavoz del Gobierno.
El nuevo titular de Economía es egresado del Colegio Universitario de Estudios Financieros (CUNEF) y con solo 23 años ya era técnico comercial y economista del Estado. Trabajó en el gobierno de José María Aznar desde 2004 hasta 2006.
Fue miembro del consejo asesor para Europa de Lehman Brothers, mientras que entre 2006 y 2008 ocupó el puesto de presidente ejecutivo para España y Portugal en esa entidad y presidente para España y Portugal de Nomura Securities.
Actualmente, era socio responsable de servicios financieros en PriceswaterhouseCoopers y desde 2010 es director del Instituto de Empresa.
Rajoy configuró un Gobierno con 13 ministerios, menos que el de su antecesor, José Luis Rodríguez Zapatero que contaba con 15, informó la agencia de noticias DPA.
La nómina se completa con Alberto Ruiz Gallardón (Justicia), Cristóbal Montoro (Hacienda), Jorge Fernández Díaz (Interior); Fátima Báñez (Trabajo); José Manuel Soria (Industria); José Ignacio Wert (Cultura y Educación); Ana Mato (Salud); Pedro Morenés (Defensa); Ana Pastor (Fomento); M.Arias Cañete (Agricultura y Medioambiente).
En la exposición de su programa de gobierno, el pasado lunes, Rajoy anunció como prioridades una estricta política de estabilidad presupuestaria para reducir el déficit público, una reforma del sistema financiero y la lucha frontal contra el desempleo, que afecta a más del 21% de la población económicamente activa del país.
El presidente y su gabinete aprobarán el 30 de diciembre próximo las primeras medidas de ajuste para intentar frenar la crisis económica que afecta a la nación europea.
Para el próximo mes de enero deberán votar una ley de estabilidad presupuestaria que completará la reforma de la «regla de oro» aprobada en septiembre pasado en España, que introduce en su Constitución el principio de equilibrio presupuestario.
Durante el primer trimestre adoptarán una «modernización» de la legislación laboral, con el objetivo de hacer frente al desempleo, la mayor debilidad de la economía española.
El líder del Partido Popular (PP) adelantó, durante su investidura ayer, que su gestión estará basada en un plan de austeridad y más ajustes, y subrayó que el objetivo es recortar el déficit público para cumplir el límite fijado del 4,4% del Producto Bruto Interno.
Rajoy no aclaró qué partidas presupuestarias se verán afectadas por el plan de ajuste, pero adelantó que la única que subirá es la destinada a las pensiones. «Todas las demás partidas son susceptibles de una revisión a la baja», advirtió.
En tanto, para mañana se espera una concentración convocado por el Movimiento 15 M, que partirá desde la emblemática Puerta del Sol, en Madrid, en protesta por el plan de ajuste de este nuevo Ejecutivo, que hará recortes por el orden de 16.500 millones de euros (21.488 millones de dólares) para el 2012 en la Administración Pública.