El resultado de la audiencia que ayer mantuvieron directivos del frigorífico Swift y representantes de la Federación de Trabajadores de la Carne arrojó como resultado una prórroga por treinta días del pago de la garantía horaria para los más de 500 operarios de la planta que la empresa tiene en Venado Tuerto, paralizada desde mediados de diciembre. La firma del acuerdo se selló en la sede local del Ministerio de Trabajo de la provincia, que convocó a las partes a un nuevo encuentro para dentro de diez días con el propósito de encontrar una solución definitiva al conflicto laboral, desatado a partir de la intención de la firma brasileña JBS de cerrar el establecimiento que tiene en la ciudad del sur santafesino.
“Es un parche que por ahora nos da oxígeno, pero no es la solución de fondo”, consideró al término de la reunión el presidente de la Federación de la Carne, José Fantini, que si bien festejó el acuerdo alcanzado, ya que da tiempo hasta el 10 de febrero para analizar posibles salidas que permitan darle continuidad al frigorífico y conservar las fuentes de empleo, puso algunos reparos. “Lo veo muy duro, porque la empresa sigue sosteniendo lo mismo, que quiere cerrar la planta”, dijo el sindicalista.
El mencionado acuerdo fue rubricado por el ministro de Trabajo provincial Julio Genesini, el presidente de JBS –la compañía brasileña dueña de Swift Argentina– Artemio Listoni, y un representante de los trabajadores. El mismo implica que los 517 empleados de la planta de Venado Tuerto seguirán cobrando sus salarios hasta el 10 de febrero, es decir 30 días más del compromiso inicial de la compañía, que había anunciado el pago de la garantía horaria hasta el próximo martes. En este lapso la empresa no podrá tomar medidas unilaterales como despidos y otras cuestiones que afecten los derechos de los trabajadores.
En este nuevo escenario, empresa, trabajadores y funcionarios de las carteras laborales de la provincia y la Nación, como también de la Municipalidad de Venado Tuerto, buscarán encontrar una salida a la situación del establecimiento. Según expresó Listoni durante el encuentro, “esta difícil situación es producto de una macroeconomía adversa para el sector frigorífico”. El presidente de JBS también se quejó porque el sector debe abonar derechos de exportación que, según su visión, le resta competitividad a su empresa frente a otras de Brasil y Paraguay.
La compañía JBS había anunciado días atrás la decisión de cerrar su planta frigorífica de Venado Tuerto, que, como se dijo, emplea a 517 trabajadores. La medida fue resistida por los obreros, que contaron con el apoyo y las gestiones del intendente de esa ciudad, el justicialista José Luis Freyre, y del gobierno provincial.
Según explicó Fantini, JBS plantea que trabaja a pérdida en las plantas frigoríficas de Argentina y que no quiere pagar retenciones, “pero cotizan en bolsa, porque son una empresa multinacional, y los balances mundiales les dan ganancia neta”. El titular de la Federación de la Carne aseguró: “Los trabajadores estamos dispuestos a todo” para salvar la planta. Y agregó que una alternativa que se baraja es la de replicar en Venado Tuerto el esquema de salvataje que el gobierno nacional impulsó en el frigorífico San José de la provincia de Entre Ríos, a través de una sociedad anónima con mayoría de capital estatal y con participación de trabajadores, productores y empresarios.
Fantini también se mostró esperanzado con que, si JBS obtiene en la distribución de la Cuota Hilton lo que ofertó anteayer, 2.900 toneladas, podría darle continuidad a la planta de Venado Tuerto. “Si consiguen eso son 35 mil cabezas mensuales, y esa cantidad no la pueden hacer con la planta de Rosario solamente”, afirmó. Por otro lado, el dirigente sostuvo: “Le vamos a plantear al gobierno nacional que nos ayude a salir de esta coyuntura, pero luego queremos más participación de los trabajadores, ya hemos perdido más de siete mil empleos en el sector, y en Santa Fe es donde más se perdió”. Y concluyó: “No puede ser que mientras otros sindicatos ya discuten la paritaria 2012 nosotros estemos peleando por conservar puestos de trabajo”.
