Glas se encuentra ahora en una comisaría, conocida en Ecuador como Unidad de Flagrancia, ubicada en el centro-norte de Quito.
Tras lo ocurrido, México anunció “el inmediato rompimiento” de las relaciones diplomáticas con Ecuador.
“Ante la flagrante violación de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas y las lesiones sufridas por el personal diplomático mexicano en Ecuador, México anuncia el inmediato rompimiento de relaciones diplomáticas con Ecuador”, escribió en la red social X la canciller Alicia Bárcena.
El presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador, advirtió: “Se trata de una violación flagrante al derecho internacional y a la soberanía de México, por lo cual le he instruido a nuestra canciller que emita un comunicado sobre este hecho autoritario, proceda de manera legal y de inmediato declare la suspensión de relaciones diplomáticas con el gobierno de Ecuador”.