Una movilización potente sacudió Rosario para respaldar a Cristina Kirchner y denunciar su proscripción

Por Juan Pablo Sarkissian

Rosario se movilizó de manera contundente, los ojos avezados de un veterano cronista señalaba una concurrencia que superaba las 20 mil personas, en respaldo a la líder del Partido Justicialista (PJ) y principal dirigente de la oposición en Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, condenada a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos por irregularidades en la causa Vialidad.

Las protestas comenzaron desde las primeras horas de la mañana de este miércoles contra la condena y proscripción de Cristina con distintos cortes de arterias.

Uno de los más importantes fue el corte total en Circunvalación y Presidente Perón (Ex Godoy) que se extendió desde las 9 horas hasta alrededor de las 14 horas.

Lo protagonistas fueron los gremios locales nucleados en la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT) seccional Rosario, del transporte terrestre como Camioneros, Recolectores, Cadetes; Gremios Portuarios y Marítimos: Dragado y Balizamiento, Conductores Navales, Somu, Marina Mercante, acompañados por Aceiteros de Rosario, ATE Rosario y organizaciones sociales como la CCC, Barrios de Pie, Movimiento Octubre, entre otras.

Más tarde, pasadas las 17 horas la Plaza 25 de Mayo se fue poblando lentamente hasta cubrir las calles Córdoba y Laprida.

“Estamos acá porque entendemos que esto está siendo un atropello a la democracia y a las garantías constitucionales. Todos vimos realmente el mamarracho jurídico que fue el juicio a Cristina Fernández”, señalaron los referentes nucleados en la Intersindical Rosario.

Y agregaron: “Esto es, lisa y llanamente, un intento disciplinamiento hacia todas y todos los que luchamos por más derechos para los trabajadores, trabajadoras, por salarios dignos, salud pública, educación pública”.

Un militante peronista se acercó a este cronista y disparo: “El mensaje que quieren dar es que si le pueden hacer esto a una dos veces presidenta, presidenta del principal partido opositor de la oposición, es como que qué nos queda a los ciudadanos de a pie, ¿no?”, reflexionó.

En tanto, Alberto Botto, secretario general del gremio Luz y Fuerza, señaló “Es una obligación, una obligación de la militancia defender el Estado de Derecho, defender la democracia. Que la hayan puesto presa a Cristina sin pruebas, porque quien ha tenido acceso, como nosotros, en leer lo que es la causabilidad, sabemos que no hay ningún punto como para justificar la condena que ha recibido”.

Y agregó: “Proscribir a la principal referente de la oposición realmente pone en riesgo el sistema democrático. Nosotros hace más de 40 años que venimos conservándolo, luchando para sostenerlo, no estamos dispuestos a resignarlo. Eso es el pueblo que hoy está en la calle, que estuvo en Buenos Aires, que está acá en Rosario y seguramente en las principales ciudades del país”.

Como sea, en un clima tenso, de alegría contenida, el acto se abrió con la lectura de un documento de la Departamental del PJ, el cual fue leído por Majo Poncino del Movimiento Evita.

El final de la lectura Poncino, disparo el primer, atronador, “Volveremos” de la multitud.

En representación de la Intersindical habló Analía Ratner, Secretaria General de la Bancaria Rosario y más tarde los organismos de derechos humanos, Hijos y la APDH expresaron sus miradas.

También tuvo espacio Alberto Franchi del Frente de Jubilados en Lucha (Frejel), quien recordó, con nombre y apellido, los diputados de Santa Fe que votaron en contra de los jubilados.

Por segunda vez en la tarde noche afloró el ya recurrente “Volveremos”.

El final fue por demás emotivo para los hombres y las mujeres que asistieron al acto: En efecto, se escuchó la grabación de Cristina que horas antes hacia su irrupción en la Plaza de Mayo en Buenos Aires.

La efervescencia tuvo su punto máximo y el “Volveremos” volvió a estallar.

Inmediatamente después se cantó el Himno Nacional Argentino con un impactante número de banderas Argentinas.

Y claro, en el final no podía faltar: La Marcha Peronista envolvió la plaza y llego, nadie lo dudaba en ese rito pagano, hasta el balcón y el corazón de Cristina.