Por José Odisio
«Yo no me bajo, sigo hasta el final». La declaración de Cristian Fabbiani luego de otra dura derrota de Newell’s generó enojo en los hinchas, en especial por el análisis erróneo del partido y esa sensación de que el Ogro pretendía seguir sin importarle el riesgo que suponía para el equipo a tres fechas del final y con el riesgo del descenso aún vigente.
Y esta vez Ignacio Astore tomó la decisión de despedirlo. Luego de las derrotas con Belgrano y Boca, el presidente leproso, con poco margen político, prefirió estirar la agonía. Pero está vez hay un párate por las elecciones y Astore consideró que es tiempo suficiente para un interino, que podría ser Lucas Bernardi.
Fabbiani tuvo un buen primer ciclo en el Parque, dónde sumó muchos puntos y casi consigue clasificar al equipo a los play offs del torneo Apertura. Pero la segunda parte, con pretemporada y mercado de pases fallido, fue un fiasco. Eliminación de Copa Argentina, refuerzos que ni siquiera juegan, un equipo físicamente deteriorado, y resultados adversos, con cuatro últimas derrotas de visitante de las llamadas ‘saca técnicos’.
Ahora resta la confirmación de su sucesor, que el lunes se hará cargo del equipo con tres partidos por delante: Unión, Huracán y Racing.
