«No lo quise matar», alcanzó a decir en medio de un estado de conmoción Susana Freydoz, la esposa del gobernador Carlos Soria, luego de la disputa que concluyó con el deceso del mandatario, reveló hoy Víctor Sodero Nievas, presidente del Superior Tribunal de Justicia de Río Negro.
La mujer se habría pronunciado así cuando los encargados de seguridad de la casa de la pareja en la ciudad de General Roca se acercaron a ver qué ocurrió en el dormitorio.
«Para nosotros hoy es homicidio», subrayó el funcionario judicial sobre el caso de la muerte del mandatario provincial, que hasta el momento se mantiene con secreto de sumario.
El titular del Tribunal provincial sostuvo que Soria y su esposa «ya habían tenido desavenencias, incluso con peleas durante la campaña electoral» de 2011, que llevó al dirigente del PJ a la Gobernación.
Sodero Nievas anticipó que este martes se darán a conocer las pericias que se hicieron sobre la mujer y el resto de los familiares que estaba en la chacra donde recibió el disparo el gobernador.
Se trata de un «dermotest» (que sirve para saber si se disparó un arma) y otros análisis toxicológicos.
“El 70 por ciento del caso está resuelto», enfatizó el magistrado y dijo que la mujer habría dicho esa frase ante los custodios que estaban esa madrugada en la chacra, los primeros en llegar a la escena del crimen.
Según dijo, la frase de la mujer se dio en «el terreno de afirma espontáneas que surgen durante ese tipo de episodios».
El titular del Tribunal Superior de Justicia, en declaraciones al canal C5N, señaló que la principal hipótesis que se trabaja es la de la «emoción violenta», que habría sufrido Freydoz durante la discusión con Soria que derivó en el disparo.
«Las desaveniencias entre los dos no se pueden disimular. Se trataba de un matrimonio con dos fuertes personalidad. No se puede decir que era un golpeador, sería agraviar e injuriar su memoria, pero tenía un carácter muy fuerte y la esposa también correspondía a esa misma línea», explicó Sodero Nievas.
A la vez, subrayó que la mujer habría llegado «al hartazgo en términos psicológicos», debido a la relación que mantenía con su marido.